Una vuelta de tuerca es la narración de una padre de familia, cristiano católico en Berlín, que tiene una familia numerosa, una matrimonio feliz y una vida profesional exitosa. Viven en una gran casa, sin problemas económicos y un gran coche deportivo que le trae de casa a Berlín y viceversa.
Hans, el protagonista, es conocido en el mundo de la prensa por sus audaces artículos en contra de la ideología de género, su testimonio cristiano en defensa de la religión y su agudeza al escribir. Es tan reconocido que un artículo titulado "El tubo de ensayo español" da la vuelta al mundo y es elogiado por todo los defensores de la vida y la dignidad de las personas. Tal es el éxito, que desde Japón requieren sus servicios para llevar una cuenta de comunicación al mundo entero y se desplaza hasta allí.
Al llegar a Nagassaki a las 4 de la madrugada, le recibe un pobre franciscano de aspecto frágil, pero que en seguida descubrirá que tras esa engañosa imagen hay un hombre templado de gran carácter y espíritu bondadoso. Esta será la primera sorpresa que se llevará el famosísimo periodista, que -¡qué menos!- esperaba sería recibido por una multinacional, con chofer y limusina... Pero al poco descubre que no le llevan a un lujoso hotel de cinco estrellas, si no al seminario de Nagasaki donde estará hospedado y lo primero que hace nada más llegar a aquel insospechado lugar es oír misa a las 7 de la mañana. Luego le llevan a dormir a su dormitorio, que no es más que una celda de monje con una cama, una silla y una mesa. Que el baño es comunitario y que, por no tener, no tiene ni ducha. Cuando se despierta el franciscano le dice que debe llevar al mundo entero la historia del doctor Nagai Takashi. Al recibir los pormenores de la vida de este santo sin altar, en el interior de Hans comienza un cambio importante, porque él se considera un buen cristiano, pero ve que realmente no hace nada por serlo más cada día de su vida. Pero el sentimiento de cambio en seguida se pasa al oír las buenas nuevas en la Agencia, lugar donde trabaja.
A su vuelta de Japón todo es diferente. Al principio es solo algo discutible, pero pronto todo comienza a desmoronarse. Su vida profesional se siente traicionada por su mejor amigo y socio; sus hijos no le toman en serio; su mujer se aleja de él; pierde su trabajo; el dinero se esfuma y su vida cae precipitadamente al pozo de la oscuridad de la razón.
Un día no calculado termina refugiándose en una pequeña iglesia en Berlín. Allí conoce a Leonard, un sacerdote que le recoge, anima y salva. Ahí, en ese momento comienza lo que da título a la obra: una vuelta de tuerca en la vida del protagonista.
Hans se da cuenta de que su cristianismo es solo una fachada y que su cambio interior será lo que le convierta definitivamente en el profesional que debe ser, el marido amante y el padre amoroso con sus los hijos.
A lo largo de la obra, se tratan temas como la ética profesional, la verdad y la mentira, la sinceridad matrimonial, la educación con los hijos, el compromiso del cristiano y la ideología de género.
La novela tiene un final insospechado y feliz, como todos los planes que Dios propone a los hombres y estos los asumen con voluntariosa humildad.
Enlazo a la magnífica entrevista que me hizo Carmelo López Arias para Religión en Libertad