El pasado 11 de febrero tuve la ocasión de asistir a la presentación de Un día, una historia, escrito por Jaime Retana y editado por Sekotia en colaboración con la Fundación Villacisneros.
En la mesa de presentación estaba el Presidente del Casino de Madrid don Javier Torrico y Torrico que actuaba como moderador. En segundo lugar lo hice yo como director de publicaciones de la editorial. Luego también intervino don Íñigo Gómez-Pineda Presidente de la Fundación Villacisneros, en nombre propio y en el de María San Gil, (Patrona de la Fundación Villacisneros), que no pudo asistir finalmente por causas particulares. Y en último lugar lo hizo Jaime Retana, autor de la obra.
Por su parte, don Íñigo Gómez-Pineda, después disculpar a María San Gil, habló sobre el objetivo de la Fundación Villacisneros e instó a los asistentes a que debemos repasar la la historia como acicate directo a la recuperación de la dignidad de España y los españoles. Recordó que España ha sido la nación más grande en dimensiones territoriales o de tiempo en toda la historia de la humanidad y que en vez de sentirnos orgullosos maltratamos a nuestros antepasados y minusvaloramos los éxitos de hoy. Un breve discurso que complació y que los asistentes aplaudieron.
Por último habló el autor, Jaime Retana, que comenzó preguntando a los asistentes sobre qué acto histórico les parecía más relevante. Algunos de los asistentes apuntaron varios y Jaime dijo que estaban reflejados en la obra. Un aspecto importante que hizo reflexionar a todos, pues los clichés de la historia están incrustados en la memoria pero... "¿Es así como todos los recuerdan? No, hay una parte importante de españoles que han creído las mentiras vertidas sobre España". Hizo memoria de varios héroes históricos españoles, batallas que hicieron doblegar a los ingleses, inventos que han dado la vuelta al mundo y cosas tan aparentemente frívolas como el Chupa-Chups, una golosina que en cualquier rincón del mundo se convierte en un pequeño souvenir español. También recordó que el logotipo de la marca estaba diseñado por Dalí, otro español, artista universal pero que en España ponen en entredicho por sus afinidades políticas.
En mi caso particular quise agradecer a la Fundación Villacisneros la valentía de ser fieles a los objetivos fundacionales y a su compromiso por colaborar en la edición de este libro tan necesario para que los españoles en general puedan estar orgullosos de la historia de España y de los hombres que la hicieron posible. También acusó a los responsables políticos de la dejadez socio-cultural, "Unos por complejos y otros por asumir las tesis de la Leyenda Negra".
Un día, una historia es un estupendo libro que nos ayuda a recordar en cualquier día del año qué España, quiénes somos los españoles y cómo debeos sentirnos de orgullosos.